El cielo más negro desde la Transición

Luis de Guindos y Jean Claude Juncker. Foto: Reuters
  • El sistema financiero español se encuentra en una situación muy delicada
  • El ministro De Guindos define el rescate como "apoyo financiero"
  • Es necesario leer blogs y opiniones de expertos para saber cuales serán las consecuencias reales de la medida tomada

La situación de España es extremadamente grave. Nuestro sistema financiero hace aguas por todos los lados y se ha convertido un Titánic a la deriva y que arrastra consigo a, prácticamente, todos los pasajeros, porque siempre quedarán los que se encuentran en los camarotes de la clase alta y se salvarán en los pocos botes que quedan.

Por este motivo, en una clara apuesta por salvar la Unión Europea -dicen los expertos que somos la cuarta potencia-, el Eurogrupo apostó el sábado por el rescate a la banca de nuestro país, aunque el ministro Luis de Guindos no parara de utilizar eufemismos y lo definiera, en la rueda de prensa correspondiente tras saberse al noticia, como "apoyo financiero". No obstante, dicha comparecencia pasará a los anales de la historia por ser la más extraña de las acontecidas, debido a que no se dijeron las cosas claras y lo realmente interesante no fue resuelto con claridad. Así pues, vale la pena analizar varios puntos que se dijeron y que habría que tener muy en cuenta de cara al futuro:


  • "Solicitar financiación europea para la recapitalización (...) Apoyo financiero". De Guindos no tuvo el valor o la valentía necesaria para decir la palabra rescate. Es más, la negó.
  • Una periodista pregunta porqué el presidente Mariano Rajoy no ha comparecido ante los medios y el ministro de Economía responde: "Yo soy miembro del Eurogrupo y el presidente no". Sí señor, eso es un respuesta (estoy hablando en modo irónico, el cual acaba aquí). ¿Tan raro parece pensar que es esta situación tendría que ser Rajoy el primero que hablara y que De Guindos le apoyara en su discurso?
  • Formulan la siguiente pregunta: "Si a la sociedad no le va a influir esta situación, ¿porqué se ha tardado tanto en pedir?". Y la respuesta no tiene tampoco desperdicio: "Perdón, pero no perdamos el turno. Su compañera".
  • No obstante, se le reformula la pregunta y ahora responde: "No lo hemos hecho antes porque ahora lo consideramos oportuno". Si sigue insistiendo que va a favorecer "el acuerdo". De Guindos, menuda papeleta te tocó defender y qué puñalada trapera te metió tu presidente al no comparecer.
  • Finalmente, se da por finalizada, por parte del ministro, la rueda de prensa y de fondo se escucha: "Hay una contradicción en lo último que acaba de decir...". De Guindos se levanta, ejecuta una mirada desafiante y adiós muy buenas. Vale que hubiera dicho que la anterior era la última pregunta, pero cuando alguien te suelta semejante dardo envenenado, por el bien de los ciudadanos creo que lo mejor es sentarse y responder con la mayor dignidad y solemnidad posible, ya que muchos nos quedamos con esto último y, sobre todo, con más dudas.

Todo esto me lleva a pensar que José Luis Rodríguez Zapatero no ha sido el mejor presidente de la historia de este país ni de la democracia española, evidentemente, pero Rajoy va por el camino de superarle. Además, si la clase política quiere que se le trate con respeto hay que llamar a las cosas por su nombre. Esto es un RESCATE con mayúsculas, aunque como tal no se quiera reconocer. Nos venden la moto de que este "apoyo financiero" es muy bueno, pero se le pregunta al ministro porqué no se ha pedido antes y no da una respuesta convincente. Además, le preguntan sobre Mariano Rajoy -ese señor que, en teoría, es nuestro presidente-, porqué no estaba en la rueda de prensa, algo que todos nos cuestionábamos, y da un respuesta que deja a cuadros a más de uno.

Es cierto que las medidas son importantes y, evidentemente, sin sanear la banca no habrá préstamos para las empresas. Pero las cosas tienen que ser claras y no dejar en el aire las exigencias que habrá. Además, nos seguimos preocupando de la banca, pero ¿qué pasa con educación, sanidad, investigación...? Los grandes olvidados en estos momentos.


El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy no compareció ante los medios en el primer momento y la labor de explicar la situación fue del ministro Luis de Guindos

En definitiva, no tenemos un claro capitán. Y es que nuestro presidente, con una mayoría absoluta a sus espaladas, Mariano Rajoy prefirió ver el partido en la selección española en Polonia y celebrar el gol de Fábregas a la desesperada como si nada hubiera pasado, antes que comparecer el primero de todos, como jefe del gobierno que es. Vamos, la situación más lamentable que se recuerda en toda la transición española. Por suerte, ahora tenemos el opio del pueblo, el fútbol y la Eurocopa, aunque igual es bueno que España caiga eliminada cuanto antes y así reaccionemos, porque si gana el tercer europeo veo que todo el mundo saldrá a la calle para celebrarlo y no ahora para reivindicar una mayor explicación y las correspondientes dimisiones, que es cuando toca..

No podemos pasar por alto tampoco que hasta el mismo sábado por la mañana, los miembros del  Gobierno seguían diciendo que no habría rescate. Es más, Cospedal apuntó que el sistema financiero español tenía solidez, vamos, digno de un buen chiste de Eugenio. Pero por momento, yo esto ya lo he vivido, como cuando no se quiso reconocer que el atentado de Madrid había sido de Al-Qaeda o el caso de El Prestige, con unas "hilillos de plastelina". Aunque nadie se libra, porque el gobierno de ZP la cagó, y bien cagada, con lo de "desaceleración económica" en vez de decir crisis. PP y PSOE, los partidos políticos más fuertes que tenemos en este país, pero que se han alejado completamente del ciudadano, al menos en sus altas esferas (aunque es cierto que a nivel de pueblos y barrios pueden llegar a hacer una buena labor), sembrando la duda al ciudadano preocupado que se deja cada día el sudor trabajando para mantener a su familia y, ahora todavía mas, al país.


Un mar de dudas en el horizonte
En nuestro horizonte más cercano hay un mar de dudas muy difíciles de responder. Por ello, en una pequeña labor de querer contribuir a aclararlas, y debido a que yo no soy economista (ahora todo el mundo sabe de economía porque en este país de pandereta -y no me escondo al definirlo así- nos gusta alardear de las cosas aunque poco sepamos de ellas), os voy a poner varios enlaces que os pueden permitir sacar reflexiones excelentes sobre lo vivido y lo que nos va a contar toda la malversación financiera:


A todos estos enlaces, habría que añadir los diferentes programas de Salvados en los que Jordi Évole ha tratado de manera magnífica dantesca situación financiera.

Y volvemos a lo del principio, la situación es dramática, hasta el punto que cada uno de nosotros se va a tener que plantear la pura supervivencia de él y de los que le rodean, ya que estamos pagando los platos rotos de otros y en, muchos casos, vivir por encima de nuestras posibilidades por culpa, mayoritariamente, de la especulación en todos lo ámbitos y la sobrada chulería a la hora de hacer las cosas. 

No obstante, este rescate es mejor que una intervención como la que se vivió en Grecia Portugal, aunque nuestro presidente desapareciera cuando más se le necesitaba, cuando nos tenía que guiar por el camino y no permanecer a la sombra de un olivo llamado La Roja - ya se lo dijo a los jugadores, que tenían que ganar para darnos una alegría. Manda huevos, parafraseando a Trillo-. Eso sí, y siguiendo con el tema futbolístico, igual nos tenemos que alegrar que en el primer partido de Alemania ganaran los alemanes a Portugal y que el autor del tanto fuera Gómez, un jugador con nacionalidad alemana y española, ya que ahora Merkel no dirá qué tenemos que hacer y por dónde tirar.

Y se ha de tener claro que las condiciones a la banca las acabaremos pagando todos y que el crédito no va a volver pronto, ya que los bancos arreglarán, o lo intentarán, sus problemas haciendo el "primero yo y después el resto". Así que dudo que en un periodo corto de tiempo haya más empleo y mejor la situación. Pero estaremos a la noticias que se vayan sucediendo. Vamos, tenemos que intentar superar el día a día y alegrarnos como si cada hora que pasara fuera la última.

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